La piel
La piel es la cubierta externa de los animales superiores y el hombre. Está constituida por tres capas, que son, situándose de menor a mayor profundidad:
1. Epidermis
Es la capa más superficial, y está constituida por diferentes tipos de células dispuestas en estratos (epitelio poliestratificado).
– Queratinocitos: constituyen el 90% de la epidermis, contribuyendo de forma fundamental a su arquitectura. Su misión fundamental es producir una proteína llamada queratina, constituyente fundamental de la piel, pelo y uñas.
– Melanocitos: constituyen entre el 5 y el 10% de las células epidérmicas. Tienen forma estrellada y se sitúan de forma salpicada entre los queratinocitos de la capa basal. Contienen melanosomas, unas organelas citoplásmicas en las que se sintetiza la melanina o pigmento que da el color a la piel, aumentando durante el bronceado solar. El número, tamaño, forma y distribución de estos melanosomas (y no el número de melanocitos, que es constante en todos los individuos) determinan las diferencias de color en cada raza.
– Células de Langerhans: su proporción en el conjunto de células epidérmicas oscila entre el 2 y el 8%. Se localizan irregularmente en el estrato espinoso. Se originan en la médula ósea y actúan en la inmunidad mediada por células, procesando antígenos y presentándolos a linfocitos T, por lo que su importancia en los procesos alérgicos cutáneos es muy grande
– Células de Merckel: son muy escasas, por debajo del 1%. Se sitúan entre los queratinocitos de la capa basal. Su misión no se conoce completamente, pero parecen jugar un papel en la recepción de la sensación de presión.
Está situada por debajo de la epidermis, de la que se separa por medio de una membrana llamada membrana basal o unión dermoepidérmica. Es una capa conjuntiva constituida por células (fibrocitos, histiocitos, linfocitos…) y fibras colágenas y elásticas, de espesor variable según las diferentes regiones de la piel. En ella se pueden distinguir dos zonas, dermis papilar y dermis reticular.
La dermis alberga además otras estructuras fundamentales como los vasos sanguíneos, que transportan el oxígeno y nutrientes a la piel; vasos linfáticos para remoción de exudados, proteínas y células; y nervios, que permiten la percepción sensorial.
3. Hipodermis
Es la parte más profunda de la piel, y está constituida por tejido conjuntivo laxo, que contiene tejido adiposo o graso. La hipodermis está sujeta a las fascias y aponeurosis musculares o al periostio de los huesos subyacentes.
4. Anejos
– Glándulas sudoríparas ecrinas
Se localizan en toda la superficie cutánea, predominando en palmas, plantas y axilas. Sólo existen en los mamíferos. Producen sudor ecrino, formado por agua y electrolitos mediante un mecanismo merocrino (sin pérdida celular), y están reguladas por fibras colinérgicas del sistema nervioso autónomo. Su misión fundamental es el control de la temperatura corporal por evaporación del sudor, aumentando su secreción en las situaciones de calor. En condiciones ideales es inodoro, convirtiéndose en oloroso gracias a la acción de las bacterias cutáneas.
– Glándulas sudoríparas apocrinas
Localizadas sólo en ciertas zonas (pubis, axilas, conducto auditivo externo, párpados, región perianal, areola, pezón, labios menores de la vulva, escroto y prepucio), son de mayor tamaño y están situadas a mayor profundidad. Tienen secreción apocrina, liberando con el sudor parte del citoplasma celular. Están reguladas por el sistema nervioso autónomo adrenérgico. El control de su desarrollo es hormonal, comenzando su actividad tras la pubertad. El sudor apocrino tiene un fuerte olor.
– Folículo piloso o pelo
Los pelos están distribuidos por toda la superficie corporal respetando palmas, plantas, caras laterales de los dedos, labios, glande y prepucio, clítoris, labios menores y cara interna de los labios mayores de la vulva. Provienen de una invaginación tubular de la epidermis en la dermis. Según su tamaño y ritmo de crecimiento se clasifican en terminales o cabellos y vellos. Su control es hormonal mediado por los andrógenos. Están íntimamente unidos a la glándula sebácea y el músculo erector del pelo, formando el folículo pilosebáceo.
– Glándula sebácea
Son glándulas que secretan sebo mediante un mecanismo holocrino, esto es, la secreción está constituida por toda la célula glandular. Dada su relación con los folículos pilosos, las zonas desprovistas de pelos (palmas, plantas, caras laterales de los dedos) carecen de glándulas pilosebáceas. Tienen el mismo control androgénico que el pelo.
– Uñas
Las uñas están formadas por células queratinizadas aplanadas, apiladas en una unión muy compacta, que se originan en la matriz de la uña, situada en la cara dorsal de la última falange de los dedos de los pies y de las manos. Crecen durante toda la vida, aunque la velocidad de crecimiento se lentifica con los años.